Ocho consejos esenciales para la temporada de planificación humanitaria de 2023

Sabemos que el proceso anual de planificación de la respuesta humanitaria (HRP por sus siglas en inglés) -que describe los planes de la comunidad humanitaria y las necesidades de financiación para cada respuesta- no hace saltar de emoción a mucha gente. Pero mientras las catástrofes ocurren en el Cuerno de África, Afganistán, Pakistán y Ucrania, y con los efectos del cambio climático y la inflación mundial aumentando la vulnerabilidad de millones de personas, nunca ha sido tan importante una planificación humanitaria eficaz.

También sabemos que las poblaciones afectadas suelen preferir recibir PTM (por encima de otros tipos de asistencia) y que es una forma eficaz y rentable de satisfacer las necesidades de las personas de una manera más digna. Por eso es esencial que los PTM sean una parte importante la HRP.

Los planes de respuesta necesitan su participación

Ahora que los PTM representan alrededor del 20% de la ayuda humanitaria internacional -y hasta un tercio o más en crisis como las de Somalia y Ucrania-, los actores de los PTM deben participar sistemáticamente en el desarrollo de planes de respuesta integrales.

El proceso anual del HRP, que se ha puesto en marcha recientemente, es EL mecanismo para que los actores humanitarios nacionales e internacionales se reúnan para decidir las prioridades y el diseño de la respuesta, incluyendo los posibles vínculos con los sistemas de protección social; cómo se supervisarán los planes y se informará sobre ellos; y lo más importante, cómo rendirán cuentas las partes interesadas a la población afectada, los gobiernos de acogida y los que financian la respuesta.

Todos sabemos que el proceso de la HRP puede resultar pesado, pero es una oportunidad clave para influir en el diseño de la respuesta. El proceso moviliza a los practicantes y, si se hace bien, crea importantes debates. El producto final proporciona visibilidad -en toda la respuesta y fuera de ella- sobre el estado de los programas de PTM, además de recaudar fondos muy necesarios para la respuesta.

Los programas de transferencias monetarias en los planes de respuesta humanitaria están cambiando

Evolución en las HRP

• El año pasado, 21 de las 27 HRP utilizaron el capítulo de transferencias monetarias, pero sólo 10 de los planes de respuesta* reflejaron con precisión el uso de transferencias monetarias multipropósito (TMM), mientras que los 11 países restantes proporcionaron información general sobre los PTM. En algunos casos, las limitaciones propias del contexto pueden impedir que se proporcione un alto nivel de detalle, por ejemplo, en Venezuela, donde las autoridades nacionales han restringido el uso de los PTM. Pero no es el caso de todos, por lo que existe la oportunidad de mejorar en el futuro.
• Los primeros análisis de las HRP de este año muestran que la mitad querría aumentar el uso de los PTM en la respuesta humanitaria, mientras que la otra mitad está reduciendo los PTM. En la mayoría de los casos, las reducciones de los PTM son muy pequeñas, pero hay algunas disminuciones significativas, por ejemplo, en Sudán (16%) debido a la preocupación por el suministro de PTM tras el golpe de estado y en Nigeria (22%) por razones no especificadas, que requieren un análisis más contextual.
• En ocasiones, se ha intentado trasladar el efectivo no restringido al sector de la seguridad alimentaria, como en la República Democrática del Congo, Haití y Ucrania. Esto ya ocurrió en el pasado en Irak, donde los TMM se trasladaron al sector de la protección. La sectorización de los programas de transferencias monetarias es totalmente contraria a su premisa y valor añadido, que consiste en trasladar la toma de decisiones a los recipientes para que determinen sus propias prioridades, que no suelen coincidir con las prioridades del sector humanitario.

El camino por seguir

Estos son nuestros ocho consejos esenciales para las partes interesadas que participan en el proceso de planificación:

Para los líderes de los Grupos de trabajo de transferencias monetarias (GTM)

• Guiar el proceso y, al mismo tiempo, asegurarse de que los debates no
  

  

  estén dirigidos por el proceso. Involucrar a las personas en el desarrollo de objetivos colectivos para abordar las necesidades humanitarias de la manera más eficaz posible, en lugar de bombardearlas con plantillas. El liderazgo es esencial en estos procesos que, si no se gestionan correctamente, pueden prestarse más a la burocracia que a la acción.

• Priorizar el análisis de la respuesta y la viabilidad aprovechando los datos y análisis existentes de los socios de PTM para desarrollar una comprensión común de las preferencias de la comunidad, la funcionalidad del mercado y la disponibilidad de los mecanismos de entrega de los proveedores de servicios financieros (PSF).

Para las organizaciones que implementan los PTM:

• Un único enfoque programático en todo el país no suele ser adecuado. Comparta sus evaluaciones y análisis para garantizar una comprensión global de la viabilidad de los PTM en todo el contexto.
• Comparta sus actividades planificadas, objetivos y cualquier indicador de resultados con el GTM, así como a través de los procesos de información adecuados, incluyendo el Módulo de Proyectos de la HRP y el Servicio de Seguimiento Financiero.
• Si no está al tanto del proceso de planificación de la respuesta, pregunte al presidente del GTM nacional si puede apoyar (el directorio de los líderes de los GTM puede encontrarse aquí).

Para los Equipos humanitarios de país y los donantes:

• Reforzar la planificación de la respuesta, especialmente en contextos de emergencia prolongada, para garantizar que se tenga en cuenta activamente a los PTM y se aprovechen las oportunidades de prestar un servicio mejor y más eficiente. Con demasiada frecuencia existe una dependencia del camino – seguimos haciendo lo que se ha hecho antes sin explorar otras opciones.
• Hay que asegurarse de que los programas de transferencias monetarias se reflejen adecuadamente en la HRP. En caso de duda, pónganse en el lugar de los recipientes a los que pretenden servir para determinar qué modalidad tendría más sentido.
• Asegúrese de que los vínculos con la protección social -en su variedad de formas- se consideren a fondo y se creen vínculos cuando sea apropiado. Al menos, este proceso ayudará a reforzar el diálogo y permitirá establecer relaciones con las contrapartes gubernamentales.

Dado que los recursos humanitarios se extienden a un número cada vez mayor de emergencias, agravadas por la inflación mundial y el cambio climático, debemos hacerlo mejor.

La comunidad humanitaria debe cumplir su compromiso de diseñar una asistencia que responda a las preferencias y necesidades de las poblaciones afectadas, y sabemos por innumerables estudios que las transferencias monetarias son muy a menudo la modalidad de asistencia preferida.

El proceso de la HRP es la mejor -y actualmente la única- oportunidad en el sistema humanitario formal para que reforcemos los esfuerzos interinstitucionales, por muy difíciles que sean.

*Burkina Faso, Camerún, RDC, Irak, Libia, Mali, Pakistán, Somalia, Ucrania y Yemen.

En la imagen: Kisimba compra pescado en un mercado local de Tundwa (República Democrática del Congo). La familia de Kisimba huyó del conflicto y se refugió en una ciudad llamada Kalemie.  Cuando regresaron, descubrieron que todo lo que habían dejado atrás había desaparecido. La vida era una lucha diaria. Entonces, Kisimba fue identificado como retornado y comenzó a recibir asistencia en efectivo del PMA. Hoy, la familia de Kisimba ha empezado de nuevo y disfruta de una vida más estable. La familia ha invertido en ganado y ha podido cultivar sus campos. Crédito: PMA/Arete/Fredrik Lerneryd. Febrero de 2021.